Nueve meses en Madrid. Es el momento de enseriarme con España. Nuestro flirting se acerca a la década y sería injusto no darle una oportunidad.
Pues ya estoy aquí. Viendo a ver cómo es el rollo de las 'S' y las 'C' y las 'Z'. Por ahora no me entero mucho de nada, pero seguro que en junio ya estaré más diestra y el castizo se me dará mejor.
Le tengo ganas a Sevilla y a San Sebastián.
Le tengo ganas al Flamenco.
Le tengo ganas a una buena fabada.
A los kilos que voy a engordar.
A los españoles que voy a conocer (por no decir besar)
Le tengo ganas a La Cibeles (la pasarela)
Le tengo ganas al Calderón, porque el Atlético de Madrid es un equipo muy cool y soy hincha desde que estaba Kiko (Un añito en el infierno, ¿se acuerdan de eso?)
La verdad es que no he tenido mucha inspiración estos últimos meses. Estoy en modo esponja, aprendiendo, aprendiendo y aprendiendo.
Es posible que no escriba mucho más, pero ojalá se me explote la creatividad y salgan cosas finas para este blog.
Seguro que sí, lo que no sé es cuanto tiempo pasará para que eso ocurra.
Por ahora, los dejo con el mejor regalo que me han podidio dar para comenzar esta nueva relación (España y yo, juntitos)
Me lo dio mi persona preferida en el mundo: Mi hermano...
Enjoy!
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